En esta sección encontrarás todo tipo de historias, desde las catástrofes más grandes, hasta historias que te harán reír y preguntarte ¿Esto puede pasar en la vida real? y la respuesta es sí, todo puede pasar si no estás asesorado; estas historias que nos hicieron llegar tenían que compartirse, para que se rían un poco y se distraigan, así también pueden llegar a imaginar lo necesarias que somos.
Cada semana cambiaremos las historias por otras nuevas que ustedes quieran compartir con el club.
Daniel estaba decidido a proponerle matrimonio a su novia, fue así que se le ocurrió meter el anillo en un sándwich, para no confundirse los preparó con diferente pan. Llegó el día y le dijo a su pareja que fueran a hacer un picnic cosa que siempre hacían, en efecto ella dijo que sí porque amaba los planes al aire libre. Al momento de comer, él puso el tesoro (así le decía al sándwich con el anillo) y el riquilon ( su sándwich) en un plato, en efecto estaba sudando de los nervios, así que para calmar el vacio que tenía en el estómago le dio una gran mordida a un sanduche sin saber que estaba mordiendo el de su futura prometida, así que empezó a masticar y sintió algo duro. El pánico de dañar el anillo y los nervios de pedirle matrimonio se juntaron y sin pensarlo escupió el pedazo que había comido en la cara de su novia. Ella al sentir la comida en la cara se levantó rápido, pero vio algo que brillaba en el mantel untado de pollo. Al entender que era un anillo de compromiso se puso tan nerviosa que se desmayo, fue así que esta propuesta de matrimonio termino con Daniel tirando champán a la cara de Andrea su novia para que despertara.
Sandra y Pablo se casaron en una hermosa y pequeña iglesia fuera de la ciudad, salieron en su carro nupcial en dirección de la fiesta que tendrían para festejar su unión. Iban 20 minutos de recorrido y no reconocían en donde estaban pero decidieron no preocuparse, sin embargo pasó una hora y ya se sentían incómodos, así que le preguntaron al conductor cuánto faltaba para llegar? a lo que él respondió que faltaban solo minutos.
Al fin estaban en el sitio, era un lugar muy parecido al que tenían que ir, aunque desconfiaron pensaron que eran los nervios lo que les nublaba los recuerdos, así que bajaron del carro y caminaron al salón que tenía la puerta abierta. Entraron saltando y Pablo grito "lo logramos", sin saber que estaban en la celebración de otra boda. Ellos quedaron congelados de la pena, pidieron perdón y retrocedieron.
Salieron con pena y enojo porque entraron al lugar equivocado que aunque era muy parecido, en definitivo no era su boda. Al fin hallaron la ubicación correcta dos horas y media tarde a su celebración, donde todos los invitados preocupados estaban esperando.
Andrés quería sorprender a Daniela con una noche romántica en su casa, alquilo un teepee y decoro la sala de su apartamento como si estuvieran en un campamento, puso velas en todo el piso, cojines y cobijas, puso luces en el techo para que se vieran como estrellas en la noche, al llegar Daniela se emociono demasiado, como su cumpleaños estaba por llegar pensó que era una celebración anticipada y se sintió mas que feliz, al momento de pedirle matrimonio a su novia Andres se arrodillo justo al lado de una vela, si pantalón empezó a quemarse, ya que usaba pantalones anchos al momento del si, el se levanto mas que emocionado, lo que el no sabia es que su pantalón se estaba quemando y cuando al fin sintió el calor en su pierna empezó a correr del susto, daniela fue corriendo por agua y tuvo que perseguí a Andrés porque entro en pánico y no dejaba de correr y gritar, cuando al fin Daniela lo alcanzo y logro apagar el fuego, corrieron a apagar todas las velas y juraron no volver a tener fuego en el piso.
Camilo planeaba pedirle matrimonio a Angélica, decidió llevarla de viaje a Cartagena para pedirle la mano de una manera diferente e inesperada. En su mente ideó un plan muy específico: la sentaría en la playa, luego él se pararía cerca al mar pero no tanto como para que el agua llegara y comenzaría a escribir "Marry me" luego la llamaría y mientras ella lee lo escrito en la arena él se arrodillaría a sus espaldas para que cuando ella volteara lo viera a él y el maravilloso atardecer. Pero en realidad paso así, todo iba bien, hasta que llegó el momento de que ella fuera a ver lo escrito en la arena, la marea subió tanto, que una ola paso arrasando con lo escrito y también con el anillo que Camilo tenía en las manos mientras estaba arrodillado esperando la respuesta de su novia. Lo que jamás imagino, fue que su pareja era una persona muy supersticiosa y le dijo que era un señal del universo que gritaba que no era el momento de casarse, fue así como Camilo volvió a casa aburrido y sin anillo.
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